Debo destacar que Santa Ana es la capital del ciclismo salvadoreño, y lo demostró con creces, al agolparse a sus calles la ciudad entera, para dar su apoyo a su niña mimada, a una de sus hijas meritísimas, a la rubia Evelyn García, entre gritos y vivas, la santaneca encontró en su ciudad natal, tanto en la salida como en la llegada a la meta, el aplauso y el apoyo continuo de su pueblo.
Ya en carretera, en pleno desarrollo de la VI etapa, Evelyn García encontró a la vera del camino a un aliado inesperado, una multitudinaria cantidad de niños y adolecentes, que gritaban al unisonó “EVELYN… EVELYN”… inspirada la santaneca, saco su casta de campeona, y sofocando todos los intentos de fugas, sobre todo de parte de la estadunidense Amber Nebem quien peleo hasta el último palmo de carretera el podio de la VI etapa, a donde se definía también la vuelta 2012.
La carrera estaba por llegar a su fin, a la entrada de la ciudad de Santa Ana, un grupo de chiquillos uniformados con sus pantaloncitos y faldas azules, embestidos en sus camisas blancas, gritaban acaloradamente, a su compatriota, al frente del grupo un pequeño ondeaba la azul y blanco, como un soldado en la batalla al frente de aquel pequeño batallón anónimo hasta ese momento, porque desde hoy los bautizo, como el batallón de los niños Héroes de mi país.
En Santa Ana, Evelyn García fue segunda en la VI etapa, y al final fue tercera en la Vuelta. de su parte quiero agradecer a todos aquellos que dieron su apoyo bajo el pabellón nacional, en alto su bandera, a los que dieron su incondicional admiración, su espera estoica bajo el sol, de pie, y de forma ordenada, no puede ser mejor nombre, que los nuevos soldados del ciclismo salvadoreño, gracias chiquillos nos dieron un gran ejemplo de patriotismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario