Guarnecía tierra de campeones

Viernes 4 de octubre de 2013. Dormitando durante casi las dos hora que duro el viaje desde la ciudad de San Salvador, luego de un cruce a la derecha en la ciudad de Texistepeque en el departamento de Santa Ana. Llegamos  hasta el pequeño pueblo de Guarnecía, enclavado  en el corazón de pequeños cerros y elevaciones que adornan  su verde entorno.

Atendiendo como grupo familiar la invitación del ministerio de educación, al acto cultural que el centro educativo Dr. Carlos Antonio Herrera Rebollo desarrollaría en su seno. Alegremente en compañía de mi tía Conchita (viuda del Dr. Herrera Rebollo), sus hijas  Ana y Alicia, el poeta  Wilfredo Marmol, mis padres Víctor y Carmen, y su servidor. Cumplimos el sueño de conocer la escuelita que lleva el nombre de mi tío y el bello pueblo de Guarnecía, que nos recibio con los brazos abiertos.

Ana, la Dra. Herrera Rebollo, mis padres Víctor y Carmen, llegan a Guarnecía.

De forma coordinada, los alumnos de dicho centro educativo, salieron a nuestro encuentro, la banda de Guerra de la escuela Dr. Carlos Antonio Herrera Rebollo, nos dio una bienvenida musical, con temas como “El torito pinto”, “El carnaval de San Miguel” y la popular canción brasileña “Moza moza... así no se me mata”. Así recorrimos las principales calles del pequeño pueblo hasta llegar a la escuela, donde un grupo de niños en perfecta formación nos recibió con aplausos y gritos de alegría, sin duda era un momento muy importantes tanto para ellos y para nosotros.

El azul del cielo contrastaba con las guirnaldas y papeles de colores que colgaban, sus instalaciones lucían limpias y resplandecientes, parecía que nuestra visita había sido tomada muy en serio. Los pequeños módulos, sus zonas destinadas a las  aéreas deportivas aunque sencillas, no parecen ser el vivero de una estirpe de campeones nacionales, que han puesto muy en alto el nombre de la institución educativa de Guarnecía.

Don Emilio Soriano recibe de la Dra. Herrera Rebollo
una foto de su esposo, Alicia Herrera a la derecha.

El acto dio inicio con la entonación del himno nacional, luego las palabras de bienvenida por parte del director del centro educativo profesor Emilio Soriano y autoridades de educación. Pasamos a la parte cultural, en el mismo se leyeron dos poemas en memoria del Dr. Carlos Antonio Herrera Rebollo, se dieron a conocer los ganadores en los concursos de dibujo y poesía en memoria de nuestro desaparecido tío, y se leyó su biografía.

Mi prima Alicia Herrera Rebollo y el poeta Wilfredo Marmol leyeron a los asistentes poemas de su autoría, siempre en memoria del Dr. Carlos Antonio Herrera Rebollo.

Imágenes  del concurso de dibujo en memoria del tío Carlos.

Al final del acto,  llego mi turno, tome el micrófono y al ver todas esas caritas llenas de amor y sueños,  mi voz se quebró, como pude aplicando toda mi experiencia como locutor, logre impostar un tono normal de voz y decirles. “Como periodista deportivo, he estado en muchos eventos en el mundo, he estado en el Tour de Francia, en Italia… pero hoy estoy orgulloso de estar aquí con ustedes”. Un nutrido aplauso llenó el salón de usos múltiples de la pequeña escuela, al tiempo que una lagrima bajó de mi ojo derecho. Los niños que en su mayoría se dedican a la música, a las artes, y a las letras, también entienden el leguaje del deporte, el cual ha sido uno de sus principales bastiones en un mundo que los tiene casi olvidados por la lejanía en que se encuentra.

Parte de la emoción de la tertulia, se centró, cuando hice entrega de un donativo  por parte de la Federación Salvadoreña de Ciclismo, que consistió en repuestos, material y uniformes deportivos, para los pequeños campeones nacionales de ciclismo de dicho centro educativo, que actualmente cuenta con tres títulos de oro y más de 7 medallas de campeones nacionales. Y si esto fuera poco, hoy en día tienen a siete corredores clasificados para la gran final estudiantil 2013, a disputarse a finales del mes de octubre año en curso.

Guarnecìa cuenta con titulos y medallas
de campeones nacionales en ciclismo.

Yenifer Contreras (de peto rojo), se adjudico
los titulos estudiantiles del  2012 y 2013.

Y si esto fuera poco, también descubrimos, que las niñas de futbol femenino, han sido campeonas nacionales tres años seguidos, y que en sus aulas, también estudia la actual campeona nacional de taek won do; Yenifer Contreras quien se adjudico de forma valiente y combativa el titulo estudiantil 2012 y 2013. Tanto ciclismo, futbol y taek won do, con sus preseas pusieron a Guarnecía en el mapa de los juegos deportivos estudiantiles de El Salvador.

Con la campeona nacional de TKD Yenifer Contreras.

La visita llegó a su final, abordamos el microbús, muy tristes, nuestro grupo familiar emprendió el retorno a la rutina de la ciudad, atrás quedaba el recuerdo de un pueblo que nos robo el corazón, como amor a primera vista, prometimos regresar. Meditando entre el verdor de sus campiñas y las serranías que marcan nuestro retorno a casa, y al descubrir su cadena de victorias humildes pero grandiosas, solo me queda  reconocer, que Guarnecía es una prospera tierra de campeones.

La familia Herrera Rebollo y los jovenes de Guarnecía.

La juventud de Guarnecía  son el vivo ejemplo que con poco recurso han logrado muchos triunfos, en nombre de mi tío Carlos Antonio Herrera Rebollo, solo puedo decirles gracias niños, gracias Guarnecía por ser tierra de campeones.