"Un buen caballo y un buen perro se llora y se entierran"... reza un viejo refrán popular, esté día, 18 de febrero de 2010, después de mas de 10 hermosos años, cansado por el paso del tiempo, murió mi querida mascota “Simba”.
Simba un hermoso ejemplar macho, de la raza “Golden Retriver”. Fue un perro mas que sensacional, formado en la academia canina de la fundación “4 Patas”, después de dos años de entrenamiento a conciencia, Simba presto un gran servicio social, a los niños con parálisis cerebral del Hermano padre Vito Guarato, cerca de Los planes de Renderos, ahí con sus juegos y su entrenamiento, Simba sembró alegría y cosecho cariño entre la población infantil discapacitada, fueron muchos años, que todos los sábados asistíamos, su carisma e inteligencia le hicieron un excelente perro de “ludo terapia”, al final tonel correr del tiempo, Simba fue jubilado y dado de baja y el perro paso a su retiro.
Hace una semana, Simba convulsionó y quedo ciego, se le prestaron todos los auxilios posibles y necesario, en los últimos días presento una recuperación satisfactoria, hasta que su bello y hermoso corazón pidió descanso, y falleció. Simba dejo de respirar a las 8:30 del jueves 18 de febrero del año 2010. Su corazón no pudo mas, el bello ejemplar de Golden Retriever había muerto. Tome su cuerpo y lo enterré en un terreno de nuestra propiedad en la playa de Conchalio.
Y es que Simba fue buen perro, que hasta tuvo “Cheros” ya muerto. Cuando baje su enorme cuerpo del carro para entrarlo en la propiedad, dos jóvenes locales al ver el tremendo animalote y su belleza física, no pudieron mas que acercarse y acariciarlo, “Que bonito exclamo uno”, y “que grandote”, dijo el otro. “les vamos ayudar”, acto y seguido tomaron un extremo de la toalla en la que lo envolví.
Cavaron afanosamente el hoyo, y me ayudaron a depositarlo, su cabecita quedo viendo hacia el norte, para que el sol del día lo salude y el sol de la tarde lo despida. Fueron duros momentos.
Pero bien dicen, que si hay cielos para los buenos perros, por allí andará el mío, corriendo, corriendo…
Adiós querido Simba, jamás te olvidaré.
miércoles, 2 de junio de 2010
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1 comentario:
Fue un gran perro, docil, obediente, inteligente; se dejaba acariciar de todos!!! si buscaramos un ejemplo de nobleza, ese era Zimba.
Siempre estará en nuestro corazón su bello recuerdo.
Descansa en paz querido Zimba Rebollo.
Salvador Rebollo
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